Y es en la última parte donde le critico al autor, es que Nelly no quiere ser la nueva reina del pop o la diva de los shows, simplemente está dejando su cabello suelto..."El vuelco sexy de Nelly Furtado llega en vivo"
Entre la Nelly Furtado del I´m like a bird y la que apareció con el disco Loose hay una brecha importante en la que la canadiense intenta desprenderse, antes que nada, de la inocencia de esas viejas canciones. Con una imponente puesta en escena, ella y sus bailarinies presentan el disco producido en 2006 por Timbaland, hombre estrella de la producción de hip hop y R&B que generó esa mutación musical y de imagen de la cantante.
Aunque Nelly alterne algunas canciones viejas (por supuesto que el tema antes mencionado también aparece), lo que predomina es el baile, las coreografías y el estallido de imagen y luz.
El show no escatima en ese tipo de calidad. Y como Furtado es una talentosa artista, el cambio estilístico no rechina, pero tampoco parece muy necesario. La Nelly de los viejos tiempos parece más auténtica que esta nueva aspirante a reina del pop anglosajón que recorre el camino de otras como Gwen Stefani y en cuya meta está el cetro de Madonna.
Ese es el problema. Comparado a un show de Madonna, Nelly todavía pierde. Será por eso que uno sigue prefiriendo verla con una guitarra al hombro.
Artículo Original: El País
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Deja tus comentarios!
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.